miércoles, 15 de febrero de 2012

EL VALLE DEL GUADIANA (PORTUGAL)

Vista del estrechamiento de Pulo do lobo

En esta entrada me dirijo a Lusitania, ese lugar cercano sin el que la península no estaría completa, sus gentes, sus costumbres, su idioma... ¡Tan iguales y tan diferentes!

Mi escoba toma el curso del río Guadiana, que, desde su nacimiento en “Villanueva de los Ojos”, se encauza “misterioso” o de forma muy singular hasta desembocar en el país vecino: aparece, desaparece, se extiende y se aprieta, forma humedales (Las Tablas de Daimiel), lagunas como las de Ruidera, se abre tanto que moldea el Embalse de Alqueva, el mayor de Europa, su recorrido es todo un colorido de paisajes que cuando se adentra en la tierra lusa traza el Valle al que le da su nombre.


EL PARQUE NATURAL DEL VALLE DE EL GUADIANA está situado en la región de Alentalejo, al sudeste de Portugal y se le concedió este distintivo con el propósito de conservar la riqueza natural y arquitectónica de la zona.

Lejos de decir que el agua corre cristalina, he de decir ¡Chocolate! Que es una palabreja que me gusta en todas sus variedades, jaja, en serio, las corrientes son turbias y tal y como disminuye el ancho del río se hace más evidente, aunque en algunos sitios se abre tanto que en verano son mansas piscinas naturales, que no limpias.

Una penillanura rodeada de monte bajo, con una vegetación similar a la de la Sierra de Huelva, entre alcornoques, encinas y jaras y además muchas variedades que solo se encuentran aquí como el trébol peludo de 4 hojas ¡Da buena suerte!

Sitio de paso de aves migratorias y donde anidan desde la cigüeña común a la negra, difícil de encontrar. Un ecosistema de gran valor roto por el Río Guadiana, que se encaja y estrecha, creando lugares únicos a su paso y de belleza salvaje como el “El Salto del Lobo”, donde caen las aguas a través de una garganta rocosa de apenas 3 metros de ancho. 


Salto de Pulo do lobo


Se extiende entre los pueblos de Serpa y Mértola, al principio he hecho referencia al patrimonio edificado en este lugar que es un auténtico tesoro y lo que queda por descubrir. Esto es fruto, en parte a su situación fronteriza, a las grandes batallas, a los grandes imperios... Los rastros de población humana se remontan a la prehistoria, después vinieron romanos, visigodos, suevos, alanos y árabes hasta la llegada de los católicos y en el futuro ¡Too se andará!

 Muralla de Serpa

SERPA, donde hacen un queso artesano para chuparse los dedos, siendo la más poblada de la comarca, de esta villa dependen 7 municipios, recogida en una muralla medieval hoy en día tiene vida de intramuros y extramuros. 


Cuando estás “dentro”, entre una maraña de callejuelas, sus casitas encaladas y bajitas con grandes chimeneas te conducen siempre a la plaza, donde también se encuentra los vestigios del castillo árabe que en su día fue el bastión del pueblo y donde en sus muros se lee la historia, merece la pena la visita.

Y MÉRTOLA, que desde la época prerromana era un importante centro comercial, El Guadiana es el segundo río más largo de la península y navegable, en otros tiempo tuvo mucha actividad, aquí había todo tipo de productos procedentes de las antiguas civilizaciones mediterráneas.

Mértola

Asentada en un montículo que se asoma a las dos riveras del río, amurallada en su totalidad ¡El abrazo de la piedra! Y coronada por un castillo musulmán, una villa con toda la esencia y la huella del pasado. 


En la actualidad se están realizando excavaciones en la antigua ciudadela y en su subsuelo hay restos de un foro y una necrópolis romana, que también fue utilizada por las culturas posteriores ¡Impresionante!

Fijaros que arco de herradura tan blanco

Tras su iglesia blanca, tan resplandeciente que brilla, se esconde su mezquita que se inició en el siglo VI, un lugar para perderse y disfrutar del tiempo, de otros tiempos y comer unos buenos caracoles si estás en fecha.

Y ¡Colorín colorado este cuento se ha acabado! Espero haberos animado a realizar vuestro cuento en estas tierras no lejanas, el vuelo no hay nada como emprenderlo uno mismo.