Hablar de erotismo e iglesias parece una contradicción, la
religión católica dota al sexo con el rango de pecado capital, por lo que las
escenas lascivas en principio no están bien contempladas, pero más que en principio
es en final, es la vista del presente la que hace que algunas secuencias nos
cueste relacionarlas con lo místico.
En el ROMÁNICO sí son frecuentes las escenas con más o menos
contenido sensual, con aparente inocencia se representa en varias ocasiones a
la lujuria a modo de bailarina, contorsionista o la niña o mujer tirándose del
pelo y los desnudos, nunca carentes de simbolismo, referentes al pecado original.
Pero cuando hablo de erotismo no me refiero a imágenes
sutiles sino explícitas, de las que dejan poco a la imaginación:
Tallas se suceden en algunos templos del norte de la península de forma dispersa. Esta dispersión se condensa cuando llegamos a la cuna de Castilla, en la antigua Merindad de Aguilar de Campoo y su entorno se multiplican.
Territorio limítrofe entre la Comunidad de Cantabria y las
provincias de Palencia y Burgos, y toda
una concentración de ejemplos de este estilo, tanto, que la mayoría de las
iglesias de algún u otro modo están provistas de algún detallito, como detalle
es que están situadas en pleno Camino de las Estrellas.
Esto también sucede de manera habitual en los límites de
Segovia, Soria y Guadalajara, otra de las delimitaciones donde más actividad se
registraba en la Edad Media
y no soy de las que creo en las casualidades geográficas.
Pongo esta foto como catálogo de los templos que contiene el
vídeo:
No poseo conocimientos suficientes para aseverar el porqué
de esta cuestión, aunque dándole vueltas puede obedecer a varios factores.
La explicación más ortodoxa es que cuanto más realismo en
la escultura más claro vería su objetivo el pueblo, que no sabía leer, como si de
un libro se tratase reflejaban las enseñanzas de una fe nueva. Esto se me cae
por completo en las numerosas iglesias del Valderredible y cuando tengo de frente la Colegiata de San Pedro de Cervatos no
puedo evitar la burrada ¡Ríase el Kamasutra! Tan ilustrativa que para mí que en
este caso la enseñanza tiene que ser otra.
Puesta en situación pienso en la reconquista, del siglo X al
siglo XII fue una época de grandes gestas donde es factible que la natalidad
más que mal vista fuese necesaria, nuevos guerreros para la causa.
Cabe la posibilidad que una religión que gana adeptos no le
importarse convivir en origen con las pautas establecidas por las
civilizaciones antiguas, muchas politeístas y matriarcales, donde la fertilidad
y todo lo que la fomentase era un regalo.
O incluso y por su ubicación, en la zona más concurrida del
Camino de Santiago y visto desde el hoy, en las autovías más transitadas hay
lucecitas rojas que anuncian el oficio más antiguo del mundo, que en el
medievo, se practicaba en los albergues que cobijaban a los peregrinos,
incluso, en algún que otro convento, siendo generosa con el clero, porque
alguno era un auténtico lupanar.
Sin ahondar más en el tema y dejando los tabúes fuera, hasta
que no se instaló la renaciente iglesia católica y cobró poder no se demonizó
el sexo, algo tan animal, como natural.
Para acabar, agradezco la colaboración de Juan Carlos Menéndez Gijón,
peregrino y administrador de varios blogs, entre ellos "Románica, enigmas del románico español”, donde encontrar muy buen románico, que a través de nuestras
tertulias y de muchas de sus fotos ha contribuido en la realización de esta
entrada.