Desde la noche de los tiempos el hombre ha empleado las cuevas como hogar, al abrigo de paredes pétreas, las primeras civilizaciones ya se cobijaban en ellas, desarrollando en su interior usos y costumbres, son testigos y transmisores de las distintas tradiciones de cada época, las pinturas, útiles, vasijas... Incluso la distribución del habitáculo, los dispares hallazgos encontrados en ellas nos acercan a la forma de vida de los habitantes de la prehistoria.
LA CUEVA HARZAL es un yacimiento
arqueológico de los más importantes de la provincia de Guadalajara, aunque
apenas quedan vestigios de su cenit en la Nueva Edad de Piedra, en su interior
se han encontrado restos de cerámicas y herramientas del Neolítico y de la Edad
de Cobre ¡Sus primeros pobladores!
También se la conoce como LA CUEVA DE
OLMEDILLAS, por su situación, está en la carretera que desde SIGÜENZA conduce a
la población de OLMEDILLAS, antes de llegar, cercana a las lindes de la vecina
Soria.
Enclavada en un paraje natural asombroso,
en la cima de un barranco calcáreo, que, como no podía ser de otro modo, se
llama de Olmedillas y no tiene perdida, tres agujeros bien visibles en la roca son su
presentación, de los cuales, solo por uno, el del centro, se puede acceder.
Ya en sus adentros, está muy dañada,
grande, muy grande, se vislumbra que era la vivienda de una población numerosa,
porque de sus primeras lunas apenas conserva lo imprescindible e inamovible.
La última utilidad que la dieron fue de
establo, guarneciendo a las ovejas que abundan en los aledaños, cercando la
superficie interna para separar el ganado bovino, aunque, creo que ahora se le
da otro uso, no puedo obviar los restos de una barbacoa que había dentro, debe
de ser la parte dedicada al fogón, aún así, con todo el deterioro, es recomendable
sumergirse en sus entrañas.
Salimos por un lateral, una puerta, que
por cierto es el camino aconsejable, tanto para salir como para entrar:
Una vez fuera hay marcados indicios de
que hubo un asentamiento musulmán, muy derruida se distingue una muralla y
algunas piedras, por su posición, parece la base de algunas casas, también, en
los alrededores, se han descubiertos utensilios provenientes de esta cultura.
Ahora ¡Me mojo aunque no haya agua! Estoy
hablando de un lugar único y he dado una pincelada de la riqueza natural del
entorno, la arqueológica, la histórica, pero me falta la que para mí fue la más
sorprendente, aquí, en pleno corazón de la península, nos encontramos esto:
Y esto:
Y esto otro:
¡Su riqueza geológica! Al igual que pasa
en el Himalaya, en algunas zonas del interior de Castilla, hay una gran
diversidad de fósiles marinos procedentes del MAR DE TETIS que en la era mesozoica o la era secundaria separaba Laurasia y Gondwana, el movimiento de
placas tectónicas y la deriva continental, como me voy a liar, mejor planto el mapa que he adquirido en
la wiki:
En la parte que nos toca, esta inmensa
masa de agua nos dejó la mejor de las caras: EL MAR MEDITERRÁNEO
Las sierras del norte de la provincia de
Guadalajara es la unión de dos cadenas montañosas donde Cronos no se puso de
acuerdo, una creada en el mesozoico, de la misma época del gran océano, conocida
como la era de los reptiles: el Sistema Ibérico; la otra, una formación nueva de la la edad terciaria o cenozoica, cuya traducción es vida reciente, que se inicia con el desplazamiento de las placas tectónicas y la separación continental, creando el mundo tal y como lo conocemos, de la también llamada era de los mamíferos:
el Sistema Central.
Un macizo antiguo y otro nuevo con un
nexo de unión común, compuestos por distintos sedimentos, dos depósitos de materias
procedentes de dos ciclos geológicos diferentes, de cuarcitas y pizarras a arcillas y calizas. Dos bastas creaciones de
la naturaleza que en este punto chocan produciendo grandes desniveles en el terreno,
en un espacio relativamente pequeño lo mismo estás a más de 2000 metros que
bajas a apenas 1200.
Aquí hubo un tiempo que había una playa a
orillas del inmenso Mar de Tetis y cuando los agricultores remueven la tierra
de los campos de labor, para la cosecha, florecen conchas de mar y no es
necesario dar más pistas… ¡Eso es todo amigos!