jueves, 20 de diciembre de 2012

SIERRA DE ALBARRACÍN "THE TEMPLE OF THE KING"


“Lejos del círculo, en el borde del mundo
ella está esperando, preguntándose,
rememorando las historias que ha oído
de lo que va a ver”

Cómo lo mucho que tiene que ver LA SIERRA DE ALBARRACÍN ¡Sus colores! La mezcla de todos ellos, los grises, los rojos, los verdes, los azules... Que por más que contrasten entre sí se solapan creando un fascinante arco iris.

Se encuentra al suroeste de Teruel y grito, y así siempre que la nombro ¡¡¡También existe!!! Haciendo alusión a que es una de las provincias con más encanto en estado puro, virgen y sin embargo, es la más despoblada, no lo entiendo, en fin, lindando con las provincias de Cuenca y Guadalajara.


Tres palabras se van a repetir una y otra vez porque son su seña de identidad: RODENO, AGUA Y FORJA, de las zonas más frías de la península, gélida y la más alta del Sistema Ibérico, aun así, para conocerla en estado puro, recomiendo su visita en otoño o invierno, un horizonte... Distinto.




Habitada desde la más remota antigüedad, en el paisaje protegido de “LOS PINARES DE RODENO” se han encontrado vestigios de civilizaciones prehistóricas, siendo numerosas las cuevas, el primer abrigo del hombre, algunas con pinturas rupestres. Actualmente, estos hallazgos atraen a un sinfín de visitantes y se ha creado un centro de interpretación arqueológico. Un enclave donde vive en perfecta armonía geología, flora, fauna e historia, además del siempre presente líquido elemento, que quimera disfrutar de la hora bruja en “LA LAGUNA DE BEZAS” ¡El espejo del sol!




EL RODENO es una piedra arenisca dúctil y porosa, de diferentes tamaños y formas, algunas con una silueta tan caprichosa que parece tallada por el hombre, en esta zona tiene un color rojizo. Se utiliza como material de construcción dando el tono rojo representativo de esta tierra, además debe de ser un buen fertilizante porque por imposible que parezca en él crece de forma salvaje la vegetación, en especial el pino, dando lugar a bosques extensos y tupidos.

Cerca de aquí, se encuentra el ACUEDUCTO ROMANO que trasvasaba el agua del río Guadalaviar desde “Albarracín” a “Cella” ¡Ingeniería maestra! De las obras hidrológicas más significativas de la época, se trata de una construcción megalítica de 25 kilómetros de longitud que data del siglo I de nuestra era y que atraviesa literalmente la montaña. Existen 8 tramos habilitados a lo largo de su recorrido y es una pasada meterse por los túneles y asomarse por las ventanitas...



Sus villas acogedoras y pintorescas, repletas de casonas señoriales donde los blasones hablan de un pasado esplendoroso, destacando “Aben Razin” que da nombre a la serranía y que este blog le dedicará su entrada.




Y “Orihuela del tremedal” y los tremedales de Orihuela.


Los tremedales son una característica del terreno que hace que cuando lo pises esté esponjoso, pero nada más lejos de una esponja, apenas drenan y con la lluvia se forman charcas temporales que con el estio se evaporan siendo el habitat ideal para el musgo, donde crece y se multiplica.

Poblaciones casi desérticas salpicadas como motitas al amparo de la montaña.


Edificaciones de 2 ó 3 plantas que se sobreponen unas sobre las otras, con fachadas encarnadas y alerones que la rebasan, ambas ceras, en los tejados ¡Se dan la mano! La arquitectura rustica rojiza...


... la forja y el hierro se han mantenido en todos sus pueblos, una rejería elaborada con mimo, a golpe de fuego y yunque con un estilo único que se ha impuesto con toda la belleza a lo largo de los siglos combinando la utilidad con lo ornamental, inspirándose en la naturaleza y en alguna ocasión, con todo el misterio que rodea a ciertas criaturas…


Las rejas de las ventanas, rematadas con figuras simbólicas para desalentar, unos acabados tan singulares como bellos, aldabas, tiradores, cerrojos, llaves, clavos, picaportes… Además de varios utensilios de uso doméstico y agrícola, el hierro fundido se ha convertido en una de las mayores riquezas del patrimonio de esta comarca.



EL AGUA, este sitio tan coqueto es la línea divisoria de aguas de la península, si cogemos los ríos Turia que emerge con el nombre de Guadalaviar y el Tajo, su curso, es como un eje que la parte casi por la mitad, además aquí ven la luz varios ríos: Cabriel, Júcar, Jiloca...

 

EL NACIMIENTO DEL RÍO TAJO se encuentra a pocos kilómetros de “Frías de Albarracín” y es este:


Lejos de ser un sitio imponente apenas tiene trazo ¡Dan ganas de ponerle un tapón! Para que salte a la vista han hecho un monumento que manifiesta la importancia de un río, que tras brotar tímido se transforma en el más largo de España y que contando el país vecino tiene más de 1000 kilómetros de largo.


Merece la pena la visita y dar con él sus primeros pasos rumbo a tierras manchegas.


En la proximidad se encuentra LA CASCADA BATIDA DE CALOMARDE, en un paraje maravilloso ¡Abracadabra y la tierra se abre! El paraíso lejos del cielo se encuentra bajo mis pies, en la erosión de la piedra al paso del río blanco y con ella “El Molino Viejo”.

La naturaleza es aprovechada por el hombre desde el principio de los tiempos, que ha utilizado su ingenio para satisfacer sus necesidades y en este espacio el agua además de abundante es juguetona. Los molinos harineros eran imprescindibles en la región y de ellos la materia prima: el pan, ubicados en sitios estratégicos donde se puede emplear toda la fuerza del agua y que hoy se encuentran en el olvido.

Completamente diferente, LA CASCADA DEL MOLINO DE SAN PEDRO, el salto se forma sobre la roca caliza creando una piscina natural. Sobre ella se distingue las trazas del canal que conducía el agua descansando sobre unos arcos.

Pinceladas azules se dibujan en todas direcciones y no puedo acabar sin mencionar un lugar que es como un caldero mágico donde “el caldo cuece a borbotones”, hablo del OJO DEL CABRIEL, que aunque no nace aquí sí es el sitio donde su cauce se hace río:



Un andurrial idílico dode el añil se torna verde entre nenúfares y un sinfín de vegetación acuática.




En esta tierra hasta las piedras toman curso y hacen cauce formándose este fenómeno geológico conocido como RÍOS DE PIEDRA, hasta la roca se transforma y se presenta en forma de caudal.




Y mucho, mucho más, este pequeño rincón de nuestra geografía tiene tanto que revelar, por no hablar de su yantar ¡Bueno, bonito y barato! Restaurantes escasos pero potentes, las migas, la sopa la abuela o castellana, el rabo de toro… Cocina mediterránea en estado puro y aunque nunca vaya a leer este post voy a hacer publicidad a un jienense que se ha embarcado en la aventura de montar un restaurante, como él dice: diferente, en un pueblito que se llama “Terriente”, no sé el nombre pero no tiene perdida, está al lado de una casa rural y creo que  es el único que hay, unas habitas con jamón ¡¡¡Ummm!!! ¡Y que la suerte le acompañe!

Aquí el vídeo que me gusta especialmente como ha quedado, con mi arco iris musical: RAINBOW.